Advierte que exonerar de sus delitos a los líderes del procés pondría en cuestión el discurso del rey el 3-O
El líder del PP y candidato a la Presidencia del Gobierno, Alberto Núñez Feijóo, ha defendido que podría tener los votos suficientes para ser investido pero ha dejado claro que no está dispuesto a pagar el precio que exigen los independentistas catalanes y aceptar una ley de amnistía que no es sino una «aberración jurídica» y que no avalan la mayoría de los ciudadanos.
Feijóo ha arrancado desde el primer momento de su intervención criticando una Ley de Amnistía, dejando claro lo que le diferencia como candidato del presidente en funciones y líder socialista, Pedro Sánchez, y denunciando lo que éste está dispuesto a hacer para seguir otros cuatro años más en La Moncloa.
Ningún fin, ni siquiera ser presidente del Gobierno, «justifica los medios», ha defendido el líder del PP, asegurando que es una persona de «principios, límites y palabra» y por tanto no está «dispuesto a renunciar a la igualdad de los españoles y todo lo que compartimos», a pasar por el «aro» que quieren imponer los independentistas «en contra del interés general» y a «traicionar la confianza» de los 8 millones de españoles que le votaron.
«Tengo a mi alcance los votos para ser presidente del Gobierno pero no acepto pagar el precio que me piden para serlo», ha aseverado Feijóo, tras defender que el expresidente catalán y líder de Junts, Carles Puigdemont, lo único que quiere es «un presidente aliado en su empeño» y que «le da igual si ese presidente es del PP o del PSOE».
«A los dos nos ha ofrecido exactamente lo mismo», ha asegurado, incidiendo en que la diferencia radica en la «integridad de los dos candidatos posibles que pueden responderle», es decir, él mismo y Sánchez.
«La honestidad con uno mismo y la responsabilidad con los demás son un valor, aunque haya quien los subestime», ha reivindicado, instando a Sánchez a tomar nota y asegurando que es algo que también le habrían dicho los anteriores presidente del Gobierno y los antiguos secretarios generales del PSOE.
«Todos nuestros predecesores habrían dicho lo mismo», ha aseverado, porque «lo que el independentismo plantea es una aberración jurídica» y constituye «un ataque directo a valores democráticos esenciales».
Así, ha denunciado que «otorgar a quienes pusieron en grave riesgo nuestra convivencia privilegios que se le negarían al resto de los españoles quiebra el principio de igualdad» y ha advertido de que «privar de todo efecto a las resoluciones judiciales que castigaron esas graves conductas rompe la separación de poderes».
Defiende el discurso del Rey el 3-O
Asimismo, ha proseguido en su argumentación en contra de la ley de amnistía, «desautorizar la defensa de la legalidad quebrantada que llevaron a cabo las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado las debilita». Igualmente, ha resaltado Feijóo, «quedaría también discutida la intervención del Rey en 2017», en alusión al discurso pronunciado por el monarca el 3 de octubre denunciando el referéndum de independencia en Cataluña.
«Todo ello se haría sin que haya detrás ninguna convicción profunda», ha afeado Feijóo, subrayando que el único motivo es «el estado de necesidad parlamentaria de una sola persona» y que además «se haría sin una sola contrapartida para el conjunto de los españoles».
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«Se cedería a cambio de nada», ha recalcado, subrayando que es «falso» que se haga en favor de la convivencia. «Se cedería a pesar de que los partidos secesionistas proclaman que volverán a repetir su desafío», ha añadido, defendiendo que ningún demócrata, o al menos él, puede «defender servírselo en bandeja».
Así las cosas, ha apostado por incorporar al Código Penal «un delito de deslealtad constitucional, como ocurre en todos los países de nuestro entorno» y por volver a castigar «el delito de malversación de acuerdo a su gravedad».
Defensa de la Constitución y la Transición
Feijóo también ha hecho una encendida defensa tanto de la Constitución como de la Transición de la que ésta emana. El líder del PP ha subrayado que la «Carta Magna es el acta de nacimiento de la España democrática, así como el fundamento de nuestro progreso a través del sistema autonómico».
Por eso, ha dicho no compartir que «ese texto pueda ser burlado mediante subterfugios que desprecien el esfuerzo de nuestros constituyentes» y que la Constitución pueda ser «contravenida con decisiones que eliminen de un plumazo la igualdad de todos los españoles».
Al hilo de ello, ha dejado claro que no es «ni jurídica ni éticamente aceptable» el plantearse una amnistía, la autodeterminación o «fórmulas análogas o equivalentes». «Fuera de la Constitución no hay democracia», ha sostenido rotundo Feijóo.
«Hay quien reniega de la Transición», ha dicho en otro momento de su intervención, explicando que él lo que quiere es reivindicarla y «reclamar su vigencia». «Es lo mejor que hemos hecho, porque lo hicimos juntos», ha valorado, advirtiendo de que «divididos nunca lograremos algo mejor».
Reivindica la victoria del PP
El líder del PP también ha aprovechado para reivindicar su decisión de someterse a un debate de investidura y para ofrecer su «alternativa» para España, recordando que su partido ganó las elecciones aunque el PSOE «ni con la más mínima cortesía» lo haya querido reconocer y que cuando Felipe VI celebró la ronda de consultas con los grupos parlamentarios fue el que presentó más apoyo, 172, más de los que según ha dicho tendría Sánchez a día de hoy «salvo que se lo oculten a los españoles».
Este debate, ha dicho Feijóo, es «consecuencia lógica del resultado electoral» y escenifica la «normalidad democrática». En su opinión, si desde el PSOE se ha criticado el hecho de que acudiera a la investidura pese a no tener los votos necesarios se debe principalmente a que la sesión de investidura «trunca su relato» y «dificulta el aterrizaje en la opinión pública del precio que otros se plantean pagar para seguir en el poder».
«Esta sesión de investidura nos retrata a todos», ha dicho Feijóo, tanto en la actualidad como «en el futuro en el que todos volveremos a responder ante los españoles».
Sánchez queda retratado
«Retrata a quien acude como un candidato libre para cumplir su palabra con los electores y a quien no lo hizo ni lo hará. Retrata a quien ha llegado a acuerdos con diferentes partidos, sin renunciar ni a sus convicciones ni a sus compromisos. Y a quien no lo hizo ni lo hará. Retrata a quien antepone el interés general a la ambición personal y a quien no lo hizo ni lo hará. Me retrata a mí y le retrata a usted, señor Sánchez», ha remachado.
El líder del PP ha recalcado que «es mentira que no exista otra alternativa» como está queriendo hacer ver el PSOE y Sánchez, a quien ha recordado que fue el primer presidente del Gobierno en 27 años que no ganó unas elecciones, como también lo es que «dejar sin efecto la justicia en función de quien delinca, promover iniciativas anticonstitucionales e inmorales» goce del respaldo mayoritario de los ciudadanos.
Según ha subrayado, esta opción «ni siquiera representa a la mayoría de catalanes» puesto que «los votantes no independentistas son casi el triple de los que no lo son». Solo el 5,5% de los españoles se pronunciaron a favor de que los independentistas fueran «decisivos» mientras que el resto no dieron su «consentimiento» para que Bildu, ERC y Junts decidan por todos los ciudadanos.
«No hay un único camino predeterminado, depende de todos nosotros que escojamos una ruta que consiste en aceptar lo que impone una minoría a sabiendas de que supone seguir dividiendo España en dos» o de elegir otra en la que se apueste por impulsar «los amplios consensos que España necesita».