Hace unas pocas semanas, un grupo de neonazis ha okupado un local en el distrito, los números 11 y 13 de la calle Juan de Olías, con la intención de “dar cobijo a los españoles más necesitados”, según promulgan. Su aparición ha generado malestar entre los vecinos, que han solicitado su salida del inmueble, convocando incluso una concentración pública con esta petición. Juventudes Socialistas de Madrid (JSM) ha manifestado públicamente su “repulsa total hacia el racismo y la xenofobia, que es lo que proclaman estos grupos de ultraderecha sin ningún tipo de complejo”.
Plácido Vázquez, Secretario General de JSM, ha incidido en que “la pasividad del Gobierno de la Comunidad de Madrid resulta, cuando menos, sospechosa. No podemos permitir que proliferen grupos neonazis en nuestra comunidad, por mucho que enmascaren su actividad como social, todos sabemos los principios racistas y radicales por los que se guían. Es el mismo modelo que intentan implantar los neonazis italianos, o el partido de extrema derecha Amanecer Dorado, en Grecia; organizaciones fascistas que camuflan su actividad como social, inculcando actitudes racistas y de discriminación hacia la gente de otros lugares o razas. Es indefendible que a estas alturas siga habiendo gente que criminalice a otras personas por su procedencia o por el color de su piel. Parece absurdo tener que recordar que todos somos iguales y deberíamos tener los mismos derechos.” concluyó Vázquez.
Por su parte Borja Frías, Secretario General de Juventudes Socialistas de Tetuán ha explicado que “es evidente que la aparición de un grupo con esta ideología ha desestabilizado el equilibrio que había en el barrio. El Gobierno de Ignacio González debe reaccionar inmediatamente ante esta amenaza real que está sucediendo en Tetuán, es importante que el problema no se enquiste y vaya a mayores. El racismo y la xenofobia no pueden tener cabida en nuestra sociedad, y es responsabilidad del Gobierno evitar que esto suceda.”
