En la parcela existente de 11.800 m2, «el Ayuntamiento obtendrá 8.500 m2 para ejecutar un equipamiento público»
Los votos a favor de PP y Vox, con el rechazo de PSOE y Más Madrid, han sacado adelante la operación urbanística en El Corte Inglés de Méndez Álvaro, un «urbanismo ad hoc» según el concejal socialista Antonio Giraldo.
Cibeles ha aprobado así las modificaciones, vía alegaciones, incorporadas al documento aprobado por el Pleno el 28 de febrero de 2023, en el expediente de la modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana de Madrid (PGOU) de 1997 para la creación de este área de planeamiento. El siguiente paso será la remisión del expediente a la Comunidad de Madrid.
El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, ha explicado en el Pleno de Cibeles que esta modificación busca «regenerar y renovar el espacio público, ampliar las dotaciones públicas generando zonas verdes y adecuar el planeamiento a la nueva realidad de ese entorno, que se ha convertido en un polo de atracción empresarial y de actividad económica».
El Ayuntamiento gana 8.500m2 para equipamiento público
A través de esta actuación urbanística en la parcela existente de 11.800 m2, «el Ayuntamiento obtendrá 8.500 m2 de esos 11.000 para ejecutar un equipamiento público».
«En la actualidad, el cien por cien del suelo corresponde a El Corte Inglés pero, una vez que se apruebe esta modificación, el 78 por ciento del suelo corresponderá a la titularidad del Ayuntamiento de Madrid», ha defendido.
Con esta modificación «se obtienen dos parcelas, con el 28 por ciento de superficie, con un incremento de edificabilidad de 15.206 m2, que tendrá calificación de uso terciario en su clase de oficinas. Y una segunda, de dotación del servicio público, con una zona verde de 8.500 m2 y una dotación para equipamiento público».
Carabante la ha definido como «una buena operación para Madrid», una vez que se proceda a la demolición del actual centro comercial y se construyan oficinas «en un entorno de una intensa actividad económica, a la espalda de la estación de Atocha y frente a la M-30».
Este expediente se aprobó inicialmente el 28 de julio de 2022, donde en el trámite de inspección pública se recibieron 24 escritos de alegación.
El socialista Antonio Giraldo ha recordado que el expediente ya pasó por aprobación provisional en Cibeles en febrero pero la Comunidad lo rechazó. El edil ha cuestionado, en primer lugar, el interés general porque se trata de una actuación «sobre un único propietario».
«Obtienen un equipamiento de aquella manera porque la parcela no tiene el espacio suficiente para materializar todo lo que tenía que ceder esta empresa e inventan una especie de calificación superpuesta haciendo una zona verde por encima», ha criticado Giraldo.
En el PSOE están «a favor de las actuaciones de dotación, incluso del crecimiento en altura». «Lo que no podemos hacer es permitir la ventanilla única, el urbanismo ad hoc», ha condenado.
Equipamiento «para los topos»
El concejal de Más Madrid Álvaro Fernández Heredia ha tirado de ironía al hablar del carácter innovador del equipamiento municipal bajo tierra porque no sabe «si va a ser para los topos». «Bajo la alfombra, ahí es donde va a estar ese gran interés general del que ustedes hacen gala», ha lanzado.
«Y el distrito resulta que ha pedido una escuela infantil, un centro cultural o un centro de mayores», ha apostillado, mientras que el área ha apuntado a «una instalación deportiva sin definir o una biblioteca». «Ustedes tienen muy claro lo que le van a dar a El Corte Inglés, lo que no tienen muy claro es el interés general», ha reprochado.
Carabante ha criticado el «discurso facilón y habitual del pelotazo» cuando «esta operación es buena porque va a permitir generar un equipamiento público en una zona en la que hay un déficit claro».
Torres de oficinas
En julio de 2022 la Junta de Gobierno aprobó de forma inicial Nuevo Sur Méndez Álvaro, que conllevaba, entre otros elementos, levantar dos torres de oficinas de hasta 27 plantas y zonas verdes donde ahora se asienta un edificio propiedad de El Corte Inglés.
Se trata de un plan de iniciativa privada que afecta a la parcela de 11.811,29 m2, situada en la calle de la Retama, número 8, en el distrito de Arganzuela, que pertenece a El Corte Inglés.
El plan buscaba «dividir la parcela, hoy de titularidad privada, en dos parcelas, para permitir la cesión de una de ellas al Ayuntamiento de Madrid, que representa aproximadamente el 72% de la superficie de la parcela inicial, con destino a dotaciones públicas locales, reubicando en la otra, un uso de servicios terciarios en su clase de oficinas con incremento de la superficie edificable».
Así se recogía en el acuerdo, donde se especifica que este ámbito está ubicado en la zona de interés arqueológico y paleontológico ‘Terrazas del Manzanares’, declarado como Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de Zonas de Protección Arqueológica por Decreto 113/1993, de 25 de noviembre sin afección vinculada al Catálogo de Elementos Protegidos del Plan General de Ordenación Urbana de 1997.
La propuesta surge «de la necesidad de corregir el déficit de dotaciones locales en el entorno, así como de hacer posible la implantación de una actividad económica más acorde con las demandas actuales», mediante la creación de espacios de oficinas adecuados, en un entorno que ganará zonas verdes.
En este lugar se prevé una gran zona verde y dos torres de uso terciario, en su clase de oficinas. Por su parte, el Ayuntamiento obtiene una parcela de 8.500 m2 para dotaciones públicas.
La altura máxima permitida será de 27 plantas, con el fin de crear en este espacio «un hito arquitectónico, un foco visual orientado hacia las grandes vías de acceso desde el sur de Madrid», tanto la red ferroviaria que conecta con la estación de Atocha como la M-30, trasladaba el Consistorio.