Vivienda y Urbanismo se reúnen este viernes con vecinos de Orcasitas para abordar eliminación del amianto de sus tejados
Las áreas de Vivienda y Urbanismo, con Álvaro González y Mariano Fuentes, respectivamente, se reúnen este viernes con la Asociación de Vecinos de Orcasitas para abordar el estado de las ayudas para la eliminación del amianto de sus tejados. El encuentro responde al compromiso adquirido por los ediles tras la protesta que los residentes de la zona protagonizaron en Plaza de la Villa para exigir los aportes económicos necesarios. Alrededor de 300 vecinos se concentraron mientras el concejal de Más Madrid, Félix López, megáfono en mano relató que «no hay edificio sin cáncer» en el barrio del distrito de Usera.
En la legislatura pasada, el Ayuntamiento aprobó ayudas para la eliminación del amianto a través del Plan Mad-RE y del Fondo de Reequilibrio Territorial. La mitad aproximadamente del vecindario afectado -más de 1.500 viviendas en casi 70 edificios- recibieron la aprobación de las ayudas. Sin embargo, la otra mitad no las pudo solicitar; ya fuera porque las comunidades no llegaron a un acuerdo a tiempo o por la propia dificultad de hacer frente a los créditos a solicitar.
Desde el área de Vivienda, con Álvaro González al frente, han trasladado que están tramitando las nuevas bases de la convocatoria. Ésta se denominará Rehabilita 2020 y se concederán subvenciones con destino a distintas actuaciones; las cuales incluyen accesibilidad, conservación, eficiencia energética y salubridad de edificios existentes de uso residencial. En esta convocatoria se recoge una línea específica para la retirada de amianto; para ello se prevé el abono de las ayudas con la licencia de obras, ha concretado el delegado.
Más peligroso ahora que hace 25 años
El amianto es un mineral que puede acabar siendo cancerígeno al inhalarse. La sustancia ha empezado a esparcirse por el aire al ir descomponiéndose con el tiempo la protección que lo cubría; es decir, «es ahora más peligroso que hace 25 años», exponían algunos de los vecinos. Las partículas ya están en el aire, detallaban desde la asociación, que sufre los problemas que ocasiona el amianto desde hace 40 años.
