En concreto, entre los compromisos del partido de Pablo Iglesias difundidos este jueves, figura la «suspensión» de todas las operaciones urbanísticas que incrementen la edificabilidad o afecten a más de 150 hectáreas hasta que se desarrolle una estrategia regional del suelo, que vetaría la ayuda pública a empresas privadas.
Isabel Serra se alinea así con las propuestas de sus compañeros de papeleta, Izquierda Unida y Anticapitalistas, respecto a poner freno a una operación urbanística que el Gobierno de Manuela Carmena en la capital quiere desbloquear antes del fin del mandato, para lo que dependen de un informe ambiental de la Comunidad de Madrid.
Hasta seis de los actuales concejales de Carmena podrían oponerse en el pleno municipal a este proyecto que prevé edificar 10.500 viviendas, un gran centro de negocios con una torre de 70 alturas y reformar la estación ferroviaria de Chamartín. Si el proyecto se somete finalmente en votación es probable que lo rechacen los tres ediles de IU, incluido el candidato de Madrid en Pie Carlos Sánchez Mato, dos de Ganemos y Rommy Arce, de Anticapitalistas, aunque se les podrían unir los dos ediles de Madrid 129 que no se presentan a los comicios.
La estrategia regional del suelo que plantea Podemos, cuya candidata no ha acudido este jueves a los actos por el 2 de mayo aludiendo su «lealtad» a los madrileños, incluiría «criterios de lucha contra el cambio climático y la despoblación rural y de búsqueda de la cohesión social». Y hasta que esta estrategia se aprobase se frenarían los grandes planes urbanísticos y citan «Madrid Nuevo Norte, los Desarrollos del Sureste o Los Carriles» que consideran «de carácter netamente especulativo».
Además, Podemos quiere impedir las ayudas públicas a estas operaciones «ya sean a través de subvenciones o regalando suelo público del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif)», con el objetivo, aseveran, de que esos recursos «lleguen a quienes más los necesitan y no al BBVA». Si Podemos llega al Gobierno se compromete a declasificar 191.192,92 hectáreas de suelo urbanizable no sectorizado en sus primeros cien días.
