La Policía Municipal se incautó a finales del mes de junio de un total de 190 botellas de alcohol de alta graduación que estaban siendo comercializadas en un establecimiento del distrito de Usera sin contar con los preceptivos precintos fiscales que establece la Ley de Impuestos Especiales. La intervención se llevó a cabo después de que agentes de la Oficina de Intervención Comunitaria adscritos a la Unidad Integral del citado distrito se percatasen de la infracción cuando accedieron a un supermercado-autoservicio.
Los efectivos policiales observaron que en el local se vendían botellas de alcohol con entre un 23 y un 56% de graduación con las etiquetas con caracteres chinos ilegibles. Durante la inspección, observaron que 47 botellas de las 190 estaban expuestas en las estanterías para su venta mientras que 143 estaban guardadas en un almacén cercano al local, propiedad del mismo. No es la primera vez que las autoridades actuaban en dicho establecimiento: ya en 2018 los agentes se incautaron de 404 botellas con las mismas características, siendo algunas extacamente iguales a la del último episodio registrado.
