El Servicio de Oncología del Hospital Infantil Universitario Niño Jesús de la Comunidad de Madrid organiza, durante los meses de verano, actividades recreativas para niños enfermos de cáncer cuya enfermedad se encuentre en proceso de remisión, con el fin de que puedan disfrutar de una gran variedad de actividades de ocio. Entre ellas se encuentra la participación en el programa de recreación terapéutica que la Organi-zación Barretstown realiza desde hace más de diez años en Irlanda. Este año está previsto que se beneficien de este programa un total de once pacientes del hospital.
Terapia y diversión
Durante un período de 15 días, los niños desarrollan en el campamento talleres de teatro, escritura creativa o cerámica, y practican actividades como la pesca, la equitación o el descenso en canoa, entre otras. Esta iniciativa les permite compartir sus experiencias con niños de muy diversas nacionalidades.
Se trata de un programa que aporta grandes beneficios psicosociales y presta ayuda emocional y social a los niños afectados y a sus familias. La organización también ofrece orientación y apoyo para contribuir a que los pacientes superen su patología, siempre bajo el control médico de oncólogos, enfermeras pediátricas y monitores que conocen la enfermedad y que acuden desde el país de origen de cada paciente.
Diez años enviando pacientes
El Servicio de Oncología del Hospital Niño Jesús envía a pacientes y a sus familiares a Barretstown des-de hace más de 10 años, y desde entonces han pasado por allí más de 100 niños del hospital. La Dra. Cristina Scaglione, adjunta a este servicio, es la encargada del programa, al que pueden apuntarse todos aquellos niños con enfermedades oncológicas cuyas condiciones clínicas lo permitan.
Los pacientes del hospital madrileño que viajan al castillo irlandés para disfrutar del campamento se encontrarán también con niños procedentes de otros centros hospitalarios infantiles de la Comunidad de Madrid y de otras ciudades españolas. Los niños toman así parte de un programa único e innovador, que juega un importante papel en la recuperación de su enfermedad.
El castillo de Barretstown, situado en las Montañas Wicklow, en Irlanda, es la sede de este programa de campamentos especiales destinados a niños con enfermedades graves, especialmente oncológicas.
