Uno de los aspectos que denuncian es la situación en la que va a quedar esta zona de Madrid, “sobredensificada por las Cuatro torres, los PAU’s, o el crecimiento de los techos de utilización de la estación de Chamartín, que pasará a tener 32 vías, 11 más que en la actualidad”, afirman fuentes de la FRAVM en un comunicado.
Según esta Federación, en la Operación Chamartín “se incrementó el volumen de edificabilidad en un 75%, una decisión en la que no ha-bía argumentos urbanísticos sino ‘de casino’ en el mercado inmobiliario”.
Entre las peticiones de la FRAVM para el nuevo proyecto se encuentra que al menos el 50% del suelo destinado a uso residencial sea para viviendas de protección pública y oficial; más espacio para zonas verdes y áreas libres, así como para equipamientos sociales; que se persiga equilibrar las carencias dotacionales de estos tres distritos afectados; o la creación de una comisión de seguimiento.
Por su parte, el portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, David Lucas, ha solicitado un seguimiento de las obras, así como que se actúe en la denominada como Colonia de la EMT, para “que no se quede aislada de la mejora de la zona”.