Un hombre cayó abatido por la Policía en Vallecas después de que éste apuñalase a dos agentes que intentaban evitar que quemase viva a su pareja sentimental.
Un varón de 51 años con varios antecedentes por maltrato murió abatido a tiros la madrugada del domingo en el distrito de Villa de Vallecas. Un agente de la Policía Nacional se vio obligado a dispararle después de que el hombre le asestase una puñalada a él y a otro compañero que intentaban impedir que el ahora fallecido intentase quemar viva a su pareja.
Los hechos ocurrieron pasadas las 2:00 horas del domingo, 12 de enero. Una mujer contactó con el 091 para avisar de que el novio de su hija estaba amenazándola con quemarla viva en su domicilio. Los uniformados se personaron en la vivienda de la víctima, ubicada en el número 12 de la calle Caranavajos, junto con la progenitora. Ésta abrió la puerta del domicilio, momento en el que el agresor se abalanzó hacia los agentes cuchillo en mano.
El individuo asestó una puñalada a la altura de la clavícula; el chaleco protector del funcionario amortiguó la cuchillada, sin embargo, el atacante le asestó otra en el cuello. Noqueado el primer efectivo, el agresor se dirigió al segundo, a quien lanzó una puñalada en el chaleco y otra en el rostro. En ese momento, «el agente que estaba en el suelo hizo uso de su arma reglamentaria y efectuó dos disparos», explicaron fuentes policiales al diario El Mundo. El individuo murió en el acto.
Grave uno de los agentes
Los servicios de emergencias asistieron a los dos agentes. Uno de ellos, de 32 años, sufrió una herida de carácter penetrante en el pecho, siendo ingresado en el Hospital Clínico San Carlos con pronóstico grave. Su compañero, de 33 años, fue evacuado al Hospital 12 de Octubre por el corte en la cara; recibió el alta médica el domingo por la tarde.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, habló con los agentes que intervinieron para desearles una pronta recuperación. En este sentido, el socialista informó a través de las redes sociales que ambos efectivos estaban fuera de peligro. Por su parte, el secretario del Sindicato Unificado de Policía (SUP), Juan Luis Torrijos, aprovechó el incidente para exigir nuevamente medios de defensa intermedios que ayuden a los policías a afrontar situaciones complicadas como la vivida en Vallecas.
