Será el Área de Cultura el departamento que, cuando le llegue el expediente, tendrá que valorar si concurren circunstancias excepcionales en torno a Zelenski
La capital podría romper su acuerdo tácito mantenido desde hace más de 40 años de no dedicar calles a personas vivas ante la «extraordinaria relevancia» del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
Ha sido el concejal de Vox, Fernando Martínez Vidal, quien ha recordado en la Comisión de Cultura que, tras 43 años y ocho alcaldes, en Madrid pervive una «especie de acuerdo no escrito» por el que no se dedican calles a personas vivas en previsión de que su trayectoria vital cambie. «Somos humanos», ha justificado.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, anunciaba el pasado 7 de marzo que un espacio público próximo a la Embajada de Ucrania llevará el nombre del presidente ucraniano, a quien denominó «faro de la libertad».
Sin embargo, para Vox este anuncio no es más que pura «improvisación» porque Almeida «se tuvo que desdecir a los diez minutos porque no había consultado ni a los técnicos».
La crítica de Martínez Vidal al alcalde es independiente de que considere a Zelenski «merecedor de todos el apoyo por ser un ejemplo de patriota que, cuando un loco invade su país, se pone el uniforme de soldado y da la cara». Vox ha planteado que el espacio se dedique finalmente al pueblo ucraniano.
La Secretaria General Técnica del Área de Cultura, Carmen González, ha justificado que la ordenanza de denominación de vías establece en su artículo 13 que se podrán emplear nombres de personas vivas que «por su extraordinaria relevancia así se considere».
Será el Área de Cultura el departamento que, cuando le llegue el expediente, tendrá que valorar si concurren circunstancias excepcionales en torno a Zelenski.