Los enemigos de España estarán encantados, es casi imposible el imaginar un desastre mayor. Este Gobierno de totalitarios y traidores iniciará el desmantelamiento del Estado, con la rendición ante los nazis de la Generalitat y la liquidación de la soberanía nacional. Se mofarán de la Justicia y la Ley, indultando a la organización criminal que perpetró el golpe de Estado en Cataluña como en el 36 indultando a los golpistas de Octubre del 34, ya que para socialistas y comunistas ellos son los únicos demócratas y todos lo demás es puro fascismo, lo que justifica plenamente todo atropello a la legalidad y el sustituir la Ley por lo que eufemísticamente denominan “justicia popular”, es decir, por lo que a ellos les venga en gana.
Y con la ayuda del poder mediático que el PP y el Ibex han entregado a la izquierda en su casi totalidad, convencerán al ingenuo pueblo español que la destrucción de la nación es justo lo que España necesita, porque como afirma el indigente mental, guerracivilista y traidor a su Patria, Sánchez: “la España nación de naciones ha de llegar”. El gran hispanista e historiador norteamericano Stanley Payne, señala las tres grandes razones que acabaron con la República, la económica, la político-institucional y el liderazgo político. La situación interna y externa de España es hoy muy diferente de 1936, pero hay similitudes importantes.
El liderazgo político es hoy mucho peor que entonces, tanto en la izquierda como en la derecha. El analfabetismo de la izquierda y la cobardía de la derecha, cuya inferioridad mediática y organizativa son pavorosas, no existían entonces. En lo político-institucional desde el Monarca, que incumplió escandalosamente su única obligación constitucional de “mediar y arbitrar, en los conflictos entre instituciones”, como en Cataluña donde ni ha mediado y mucho menos arbitrado, a la Fuerzas Armadas que no han levantado la voz ante el evidente proceso de liquidación de la nación, o los poderes económicos y financieros que han puesto todos los grandes medios de comunicación al servicio de los enemigos de España, nada se puede esperar. Y solo queda la economía.
Es aquí donde reside la esperanza de que el pueblo español reaccione y como en Julio del 36 no se resigne a morir. La política económica de un gobierno de socialistas y comunistas bolivarianos nos lleva al desastre no solo político, sino también político y social. Y aunque increíblemente, como sucede en todos el mundo civilizado, ni un solo medio importante del país ha hecho un balance económico del primer año de gobierno de Sánchez y sus socios del Freente Popular Separatista, este ha sido la continuidad del desastre económico y social del indigente mental, guerra civilista y traidor a España Zapatero. Sus principales rasgos de identidad: INCERTIDUMBRE, INSEGURIDAD JURÍDICA, SECTARISMO E IGNORANCIA ELEVADO A SU MÁximo 50 años.as generaciones futuras durante los preeuda decontrol absoluto del gasto pque y se convierta en una unidad adminisXIMA EXPRESIÓN, HUNDIMIENTO DE LOS INGRESOS FISCALES Y DESCONTROL ABSOLUTO DEL GASTO PÚBLICO.
Zapatero destruyó el sistema de Cajas de Ahorro, referente del ahorro popular durante 170 años. Sánchez y sus socios están destruyendo lo que queda del sector bancario y los sectores industriales esenciales ( automoción, gas y electricidad, y el grueso del sector exportador), y puesto en marcha la destrucción de la agricultura y la ganadería con el desastroso acuerdo de Mercosur. Las agencias Moody´s, S&P y Ficht, están rebajando todas las calificaciones españolas, en particular las de la banca y las del sector eléctrico.
La inversión extranjera, consecuencia de la incertidumbre y la inseguridad jurídica, ha caído en 15.700 millones desde que el Frente Popular Separatista llegaron al poder, un desplome del 77,7%. La deuda del Estado en circulación ha crecido en 53.000 millones, un 51,4% mas que en los doce meses anteriores, lo que ha llevado a una burbuja de deuda insostenible, que solo se mantiene por la compra ilimitada de deuda a interés cero del BCE, pero que será la ruina de las generaciones futuras durante los próximo 50 años .Mayor déficit estructural de la zona euro con un 3,2%. Déficit estructural y deuda son una combinación mortal que pone en cuestión la solvencia del Estado.
La caída del crecimiento y del empleo a pesar de las mentiras oficiales son ya imparables, y en el próximo otoño no habrá posibilidad de ocultarlas. En crecimiento el PMI del sector manufacturero ha experimentado su mayor caída desde 2013, y el PMI composite (PIB) esta creciendo al 1,6% y no al 2,3% oficial. En el empleo, y por primera vez en años el paro registrado corregido de variación estacional se incrementó en 9.000 personas en Junio y las afiliaciones a la Seguridad Social crecieron la mitad que en Junio 2018.
Y sobre esta fuerte desaceleración en marcha, un nuevo gobierno no ya solo de socialistas sino de socialistas y comunistas bolivarianos se apresta a realizar lo que eufemísticamente denomina “política progresista”, que se iniciará con la mayor subida de impuestas a familias, autónomos y empresas de la Historia de España, que el caso de las familias soportan ya la tercera presión fiscal mas alta ( el 48,5% de su renta disponible bruta) de Europa y de la OCDE. Hasta un niño de primaria se daría cuenta que esta orgía fiscal que preparan socialistas y comunistas nos llevará al mayor desastre económico y social desde la Guerra Civil.