Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

El Apagón de New York de 1977; La noche de los animales

Término tomado de la meteorología, por la expresión “Tormenta Perfecta” se conoce de manera coloquial a la suma de una serie de circunstancias negativas que combinadas en un determinado espacio y tiempo son capaces de desencadenar consecuencias devastadoras e imprevisibles. Pues bien, algo así se puede decir que sucedió en Nueva York, en el comienzo del verano de 1977, un 13 de Julio.

Todo comenzó cuando pocos minutos después de las 20.30, un rayo inutilizó una subestación eléctrica en el río Hudson. Poco minutos después otra rayo afecta a una planta nuclear de 900 MW en Indian Point, provocando inmediatamente una sobrecarga en las líneas de trasmisión por encima de sus límites normales, lo que hace que salte el protocolo de emergencia de  Consolidated Edison, la empresa de electricidad que daba servicio a la Ciudad de Nueva York,. Pero casualmente nadie estaba en la estación, por lo que el inicio remoto que se debía activar en el plan de emergencia falló. A los pocos minutos otra serie de rayos afectan a varias líneas críticas de trasmisión. Los problemas técnicos se suceden hasta que por fin pocos minutos después de las 21 horas todo el sistema eléctrico de Con Edison se apagó, dejando a más de 9 millones de neoyorquinos a oscuras. La Tormenta Perfecta se había desencadenado, dejando más de 24 horas a todo Nueva York sin electricidad.

No era la primera vez que un apagón dejaba en penumbra a la ciudad de Nueva York. Así, en noviembre de 1965 un gigantesco apagón eléctrico paralizo ocho estados de la costa este y parcialmente dos estados del Canadá, incluyendo a la ciudad de Nueva York, afectando a más de 35 millones de personas. Pero si bien en el apagón del 65 se recordará principalmente por el ambiente festivo de los lugares afectados y porque la natalidad se disparó nueve meses más tarde, las consecuencias del apagón del 77 serían diametralmente opuestas. Si en el 65 fue una fiesta, el del 77 fue una verdadera pesadilla. Saqueos, vandalismo e incendios se propagan por doquier. Como botón de muestra en Brooklyn 75 tiendas fueron saqueadas en un radio de menos de 5 manzanas. Con más de 500 oficiales de policía heridos y el mayor arresto masivo de la historia de Estados Unidos, Nueva York estaba sumida en el más absoluto caos. Visiones apocalípticas como todoterrenos arrancando de cuajo las rejas de las tiendas mientras los saqueadores eran jaleados por la multitud se suceden mientras los bomberos se ven incapaces de sofocar los incendios provocados por una turba descontrolada. Con la policía desbordada (“Atrapas a cinco o seis y aparecen cien. Vamos a un sitio y los que no están saqueando, avisan a los demás con silbidos de nuestra llegada. Lo único que podemos hacer es sacar a la gente de las tiendas; pero se van a la de al lado» declararía un sargento de la policía metropolitana), joyerías, supermercados, y tiendas de electrónica son arrasados por una turba incontenible. Barrios como Harlem o el Bronx se convierten en un verdadero territorio de guerra. En este último barrio, un concesionario de Pontiac  es saqueado, con el robo de más de 50 coches a estrenar.

¿Pero por qué se desató esta orgía de destrucción en la capital financiera del mundo?. Para empezar hay que señalar que en 1977 Nueva York era una ciudad especialmente convulsa. La crisis del petróleo golpeaba ferozmente el modo de vida americano, Estados Unidos registraba el mayor déficit comercial de su historia, y los poderes públicos se vieron obligados a rebajar las prestaciones sociales de una manera significativa. Estos recortes repercutieron principalmente en los barrios más desfavorecidos de la ciudad, cuyos habitantes dependían en gran manera de los subsidios sociales para su supervivencia. Por otro lado las tensiones raciales eran constantes y cada vez más virulentas y frecuentes, y la delincuencia había alcanzado en Nueva York niveles desconocidos hasta entonces. Por ejemplo, en ese momento, los habitantes de la ciudad York estaban atemorizados por los asesinatos de un homicida, al que se conocía como “el Hijo de Sam” (el cineasta Spike Lee retrató en su película “El verano de Sam”) el cual aleatoriamente y sin mediar palabra disparaba sobre los transeúntes. Nueva York en esos años era una ciudad caótica, peligrosa y tomada por traficantes de droga (la heroína había reaparecido al por mayor a principios de la década, de la mano de los soldados que volvían de Vietnam con la adicción como equipaje), con el dudoso honor de ser considerada como una de las ciudades más peligrosas de todos los Estados Unidos; la ciudad de Taxi driver. Y es que faltaban bastantes años para la llegada de Giuliani a la alcaldía, la regeneración de los espacios públicos y su “tolerancia cero”. Y para más inri ese verano estaba siendo uno de los más calurosos de las últimas décadas.

Las daños directos producidos por el apagón fueron de una magnitud tremenda; más de 1600 comercios saqueados, alrededor de mil incendios provocados, 4.000 detenidos y un coste de más de 300 millones de dólares de esa época. Y a raíz del apagón de julio de 1977, se llevaron a cabo importantes cambios técnicos en la estructura y diseño de la red eléctrica neoyorquina, los cuales todavía siguen vigentes para poder evitar una situación similar a la vivida esa fatídica jornada. Pero el famoso apagón no solo provocó consecuencias económicas. Un hecho tan cinematográfico como dejar a la capital financiera del mundo a oscuras durante 24 horas debiera por obligación empujar a algo más que caos y destrucción. Así, para los más románticos, si en el apagón del 1965 se produjo un boom de la natalidad (dato incierto según las estadísticas reales), en el de 1977 se desencadenó el nacimiento de la música denominada Hip Hop, y es que es que el saqueo masivo de tiendas de electrónica pobló barrios como el Bronx o Harlem de infinidad de equipos de música, mesas de mezcla, micrófonos y elementos electrónicos y no solo como causa directa de los robos, sino también por la proliferación en las semanas siguientes de un floreciente mercado de segunda mano de artículos robados. Nunca ser DJ había sido tan fácil en los barrios más desfavorecidos de Nueva York, y a parir de ese momento el Hip Hop empezaría a enfrentarse a la todopoderosa música disco. Una leyenda urbana reflejada por ejemplo en la Serie “Get Down”. Pero si la relación de
nacimiento del hip hop con el famoso apagón parece fruto de la mente creativa de un guionista de comic, lo que es indudable es la repercusión a nivel político que tuvo el hecho. Así, nada más producirse el blackout, un portavoz de la empresa responsable de la producción y distribución eléctrica en Nueva York,
Consolidated Edison, declaró que había sido “un acto de Dios”, provocando la ira del en ese momento alcalde Abraham Beane, que tras acusar a la empresa de gravísimas negligencias, llegó a exclamar que pensaba que los ejecutivos de la empresa eléctrica “debieran ser condenados a la horca”. Rápidamente, y una vez restablecido el suministro eléctrico, los poderes públicos intentaron paliar las consecuencias políticas que se pudieran derivar de las 24 horas de caos sufridas en Nueva York. Así el presidente Jimmy Carter dio órdenes expresas a la Comisión Federal de Energía para que iniciara una investigación sobre el hecho, y con una celeridad poco habitual estos comunicaron que la empresa eléctrica estaba mal preparada para poder afrontar una contingencia de este tipo, careciendo de planes y protocolos de emergencia. Por otro lado la Comisión Estatal de Servicios Públicos ordenó a pagar en efectivo a los dueños de los negocios y a los usuarios las pérdidas que sufrieron a causa del apagón, y a nivel estatal el Gobierno prestó ayuda financiera y créditos blandos a los miles de comerciantes a los que les habían destruido sus negocios. Se estaba intentando por todos los medios frenar un posible descalabro electoral de las autoridades que en ese momento regían la Ciudad de Nueva York, donde se tenían que celebrar elecciones a la Alcaldía ese mismo año. Pero con todo y con eso, en las elecciones de Noviembre, el alcalde en el cargo, Abraham Beame no pudo ni llegar a ser nominado por el Partido Demócrata ya que fue vencido en la primarias por Ed Koch (que más tarde ganaría la elección a la Alcaldía) y Mario Cuomo. El apagón de Nueva York se cobró su última víctima 100 días más tarde.

Y es que la famosa Noche de los Animales, como la denominó un alto cargo policial, tuvo consecuencias de todo tipo, y para muchos neoyorquinos su ciudad, al igual que ocurriría con los luctosos hechos del 11-S, nunca volvería a ser la misma.

 

 

Loading

Loading

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

el distrito tv

Últimas Noticias

Scroll al inicio