Las esperadas negociaciones de paz entre Ucrania y Rusia previstas en Estambul han comenzado con un fuerte contratiempo: el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha anunciado que no participará en las conversaciones al confirmarse la ausencia del presidente ruso, Vladimir Putin.
Este revés supone un golpe para las esperanzas de alcanzar un acuerdo de alto el fuego en una guerra que ya supera los tres años, con cientos de miles de muertos, millones de desplazados y una creciente presión internacional para encontrar una salida negociada al conflicto.
En una publicación en X, Zelenski manifestó: Hoy, Rusia demostró una vez más que no tiene intención de poner fin a la guerra, al enviar una delegación de representantes de bajo nivel. Además, este enfoque ruso es una falta de respeto hacia el mundo y hacia todos los socios. Esperamos una respuesta clara y contundente de nuestros socios.
Zelenski dijo que él y Erdogan discutieron «las garantías de seguridad, el monitoreo del alto el fuego, el desminado marítimo, la reconstrucción de Ucrania y el desarrollo de la asociación entre nuestros dos estados».
En una rueda de prensa previa desde Ankara, Zelenski señaló: «No podemos andar por todo el mundo buscando a Putin. Siento una falta de respeto por parte de Rusia. No hay hora de reunión, ni agenda, ni delegación de alto nivel; esto es una falta de respeto personal, a Erdogan y a Trump», declaró el lider ucraniano.
Putin delega en funcionarios sin poder ejecutivo
El Kremlin había sugerido inicialmente que Putin podría asistir personalmente a las negociaciones, dando lugar a una ola de expectativas en las capitales occidentales. Sin embargo, Moscú ha optado finalmente por enviar a una delegación liderada por Vladimir Medinski, un asesor presidencial, acompañado por el viceministro de Exteriores Mijaíl Galuzin y el jefe de inteligencia exterior Serguéi Narishkin.
La delegación habia sido calificada por Zelenski como «decorativa», indicando que los enviados rusos no tienen autoridad real para cerrar acuerdos vinculantes. “No se puede hablar de paz con quienes no tienen poder de decisión. Si Putin no se sienta en la mesa, las conversaciones son una farsa”, declaró Zelenski
Zelenski exige un cara a cara con Putin
Desde el inicio de la guerra en febrero de 2022, Zelenski ha mantenido que cualquier acuerdo de paz requiere una reunión directa entre líderes. En 2022, intentos similares de negociación en Estambul se vieron frustrados por diferencias irreconciliables, particularmente sobre los territorios ocupados.
Esta vez, la presión internacional había logrado reactivar el diálogo. Sin embargo, la ausencia de Putin ha sido interpretada en Kiev como una señal de que Rusia no está dispuesta a comprometerse sinceramente con la paz.
Además, Ucrania ha expresado su disposición a aceptar un alto el fuego temporal de 30 días, propuesto en su momento por el presidente de EE. UU., Donald Trump, quien tampoco asiasistirá personalmente a las conversaciones.
Trump también se ausenta, pero envía delegación
El presidente estadounidense, Donald Trump, había condicionado su presencia en Estambul a la asistencia de Putin. Al confirmarse la ausencia del líder ruso, la Casa Blanca optó por enviar una delegación encabezada por el secretario de Estado, Marco Rubio, junto a los asesores especiales Steve Witkoff yKeith Kellogg.
Esta delegación tiene como objetivo principal impulsar un alto el fuego inmediato de 30 días, una propuesta promovida por la administración Trump como paso preliminar a un acuerdo más amplio.
El estancamiento diplomático coincide con un aumento de las hostilidades en el frente sur y este de Ucrania, especialmente en las regiones de Zaporiyia y Donetsk. Los informes de las últimas semanas apuntan a nuevas ofensivas rusas y contraataques ucranianos, mientras las poblaciones civiles siguen sufriendo bombardeos diarios y cortes de servicios esenciales.