Conseguir la integración de los distintos colectivos de inmigrantes en España a través del deporte. Ese es el principal objetivo a alcanzar con la celebración del V Mundialito de la Inmigración y la Solidaridad que se desarrolla del 16 de junio al 22 de julio. Realizar acciones que articulen un intercambio cultural que promueva la tolerancia y la convivencia en España de distintos pueblos del mundo es otro de sus cometidos a través de un torneo de fútbol en el que este año participan 28 países. El Mundialito se organiza en siete grupos de cuatro equipos. Las selecciones que participan este año son: Angola, Argentina, Bolivia, Brasil, Bulgaria, Cabo Verde, Camerún, Chile, China, Colombia, Ecuador, Reino Unido, Guinea Bissau, Guinea Ecuatorial, Guinea Conakry, Honduras, Mali, Marruecos, Nigeria, Paraguay, Perú, Polonia, Rumanía, Senegal, Suecia, Ucrania, Uruguay y Venezuela.
El recién remodelado estadio del Antiguo Canódromo fue el escenario elegido para inaugurar, el pasado sábado 16 de junio, esta quinta edición. El primer partido lo protagonizaron las selecciones de Paraguay, vigente campeón, y Mali, equipo debutante. El encargado de realizar el saque de honor fue el jugador del Getafe Gica Craioveanu, acompañado de su hijo. El partido acabó con una contundente goleada del combinado paraguayo por 9-0.
En la jornada disputada el pasado domingo 24 de junio en los campos de la Federación de Fútbol de Madrid Ernesto Cotorruelo, se jugaron partidos de alto nivel. Uno de los más destacados fue el que enfrentó a los combinados de Nigeria y Uruguay en el grupo C. Los africanos se impusieron por 6-3 y lograron de esta forma su segunda victoria. Los vigentes campeones, Paraguay, no pasaron del empate con Polonia en el grupo A, aunque mantienen intactas sus opciones. Otro de los encuentros destacados en la segunda jornada fue el que disputaron Guinea Bissau y Perú en el grupo D. El triunfo de los guineanos por 2-1 les deja en bandeja el acceso a cuartos, aunque lo han de confirmar el próximo domingo ante Ucrania.
