Papeles, excrementos caninos, plantas secas y terrizos donde un día hubo césped fresco. Ese es el estado que presenta actualmente el bulevar de la calle Villacarlos. Una situación que los vecinos de la zona han denunciado en numerosas ocasiones sin que aparentemente sus quejas hayan sido escuchadas.
A todos estos problemas de conservación se unen además los ocasionados por el comportamiento incívico de un grupo de individuos que, desde hace algunos meses han fijado en las aceras del bulevar su punto de encuentro. Como resultado de estas reuniones, los vecinos aseguran que resulta frecuente encontrar restos de bebidas alcohólicas, basuras e incluso a alguno de los propios individuos durmiendo en el suelo. Los afectados afirman además haber sido víctimas de increpaciones, insultos o de comentarios obscenos ante los que se sienten indefensos. Para solucionar esta situación que está acabando con la vida del bulevar, los vecinos reclaman la presencia de la Policía Municipal en la zona. Sólo así volverán a salir tranquilos a la calle.