Potenciar la actividad comercial y recuperar más espacio urbano para uso y disfrute de los vecinos en la calle Fuencarral es el objetivo del Ayuntamiento de Madrid. Para lograrlo, se van a acometer una serie de remodelaciones que afectarán al tramo de la calle comprendido entre las glorietas de Quevedo y Bilbao. Entre ellas destacan la redistribución de los espacios de la vía y la reducción del ancho de la calzada al estrictamente necesario para el tráfico previsto, con bandas de aparcamiento exclusivas para carga y descarga.
En definitiva, una ampliación de las aceras que facilitará el tránsito peatonal y que supondrá la supresión de las barreras urbanísticas. Además, aprovechando las obras se cambiará el mobiliario urbano el alumbrado público y la señalización y se plantarán nuevos árboles.
El plazo de ejecución previsto para estos trabajos cuyo presupuesto supera los dos millones de euros, será de 4 meses.