Un jurado popular apreció una eximente incompleta por legítima defensa al ser objeto el condenado de una paliza
La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a siete años de cárcel a un hombre por el homicidio de un presunto pandillero en el barrio de La Elipa, en el distrito de Ciudad Lineal, crimen que se produjo en diciembre de 2020 en el transcurso de una reyerta iniciada supuestamente por miembros de los Dominican Don’t Play (DDP) contra el condenado.
Así consta en una sentencia, a la que tuvo acceso Europa Press, en la que los magistrados condenan al acusado por un delito de homicidio con la eximente incompleta de legítima defensa.
Un jurado popular dictaminó que se apreciara en la condena una eximente incompleta por legítima defensa al entender que hubo un exceso de defensa en el uso de un objeto punzante para defenderse de la agresión de la que fue objeto cuando bajó a comprar tabaco y que clavó en una zona de carácter vital.
El tribunal reprocha en la resolución el uso de tal objeto pero reconoce que la reyerta se produjo de manera inesperada al encontrase casualmente con un familiar del fallecido contra el que tenía una enemistad previa y sus amigos, acudiendo al empleo de una varilla de hierro con escaso tiempo de reflexión.
En el juicio, el acusado negó ser el autor del crimen y se declaró víctima de la banda latina de los DDP. Frente a ello, el fiscal le acusaba de matar a este vecino durante una pelea callejera que tuvo lugar la madrugada del 12 de diciembre de 2020 en La Elipa, en la calle María Teresa Sáenz de Heredia, hechos por los que el fiscal solicitaba 14 años de cárcel por un delito de homicidio.
El crimen se habría cometido días antes a que el procesado tuviera un incidente con el sobrino del fallecido. Al parecer, el acusado vivía con su pareja y sus tres hijos supuestamente en un bloque de casas okupadas de la zona, unos pisos en los que también residiría el familiar de la víctima.
En su declaración, el acusado relató que aquella madrugada bajó a comprar tabaco cuando observó que había un grupo de personas, de origen sudamericano, bebiendo en la zona a pesar de las restricciones por la pandemia y entre los que estaba el sobrino del fallecido.
En un momento determinado, estas personas le increparon y uno de ellos le rompió una botella en la cabeza, cayendo al suelo y recibiendo una brutal agresión.
Según su versión, sus agresores pertenecen a la banda latina de los DDP al reconocerles por los gestos que hacían con sus manos y la vestimenta que lucían. Tras la agresión unos vecinos llamaron a la Policía y junto a los agentes les identificó al estar aún los chicos en la calle.
Días más tarde, la Policía se presentó en su casa y le detuvo. El acusado manifestó que entonces no sabía por qué lo hacían. En su bolsillo, los agentes hallaron dos vástagos de acero, algo que, según ha dicho, utilizaba para arreglar el tornillo de sus gafas.
Hechos juzgados
El escrito de la Fiscalía señala que el acusado, tras un incidente previo con la víctima, sobre las 21:45 horas del 12 de diciembre de 2020 se encontraba a la altura del número 10 de la C/ María Teresa Sáenz de Heredia de Madrid.
En ese preciso instante comenzó a ser perseguido por H. V. B. A., con el que mantuvo un forcejeo, y a raíz del mismo ambos cayeron al suelo. Fue entonces cuando N. J. J. clavó hasta en 3 ocasiones a la otra persona en la zona pectoral izquierda una varilla de hierro que portaba.
H. V. B. A. falleció el día 13 de diciembre de 2020 sobre las 02:45 horas en el Hospital Universitario Infanta Leonor como consecuencia de un hemopericardio que originó un taponamiento cardiaco y una parada cardiorrespiratoria irreversible.
El acusado fue privado de libertad por esta causa el día 16 de diciembre de 2020, habiéndose acordado su prisión provisional comunicado y sin fianza por auto de 19 de diciembre de 2020.