En plena tormenta interna dentro del PSOE, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García‑Page, ha rescatado una frase del pasado que, a su juicio, explica mucho del presente: “He hablado con Begoña y le he dicho que si vuelvo a la política nacional es para liarla, para liarla gorda”.
Esta declaración, que Pedro Sánchez habría pronunciado en una entrevista en 2014, ha sido recordada por García‑Page durante una entrevista este miércoles en el programa ‘Herrera en COPE’, en la que ha sido especialmente duro con el actual presidente del Gobierno y líder del PSOE.
Según García‑Page, la cita refleja con ironía la deriva del partido en los últimos meses: “Esto, al menos, sí que lo está cumpliendo”, afirmó con sorna el presidente castellanomanchego, en clara alusión a la crisis de liderazgo y credibilidad que atraviesa el PSOE, tras el terremoto político de los casos de corrupción que estamos conociendo, como la mujer del presidente, el hermano de Sánchez, dos secretarios de Organización del PSOE y lo que aún falta por salir.
Durante la entrevista, García-Page no escatimó en críticas. Habló de un PSOE “bunkerizado”, un partido que “ha perdido el rumbo” y donde “la movilización interna está prohibida”. Acusó a los socios que le apoyan de actuar más como “accionistas” que como responsables políticos, interesados en mantener a Sánchez en el poder a toda costa.
Page se ha mostrado muy preocupado por la situación que atraviesa su partido, se ha pronunciado sobre el futuro de Sánchez y ha asegurado que «todavía queda mucho por saberse». «Estoy muy dolorido, he estado muy destrozado estos días», ha reconocido sobre cómo está viviendo esta situación.
«Hay ministros que han grabado en pendrive las conversaciones con el presidente. Hay que atarse los machos”, ha declarado.
Críticas duras contra Pedro Sánchez
Además, alertó de que “lo más grave aún no ha salido en los periódicos”, insinuando que ministros tendrían en su poder grabaciones comprometedoras.
Aunque el propio García-Page aclaró que no cree que exista una financiación ilegal estructural en el PSOE, sí admitió que “hubo quien pidió dinero por intereses ajenos al partido”.
“Es el momento más grave de credibilidad del PSOE en su historia reciente”, ha alertado el dirigente socialista para quien “muy poca gente cree a la dirección” del partido. “El victimismo ya no cuela”, ha añadido Page para criticar “tanta ceremonia de confusión” que, a su juicio, provoca que “a la gente le cuesta distinguir quién sirve a España o quién se sirve de España o quién apoya al PSOE o quién se apoya en el PSOE”, en alusión a la presunta trama que formaban Cerdán, el exministro José Luís Ábalos y su exasesor Koldo García.
García-Page también ha señalado que la continuidad del Ejecutivo sea atribuido a la extrema derecha, como “coartada”. “El gobierno actual depende de la extrema derecha nacional como coartada para seguir manteniendo el muro y depende del oxígeno que le da de la extrema derecha independentista que amenaza la unidad y la igualdad entre los españoles con tintes xenófobos que es Junts per Cataluña, que es Puigdemont”, ha sentenciado.
La Fiscalía Anticorrupción y la UCO continúan investigando una presunta red de corrupción que, cada día que pasa, se acerca más a la cúpula socialista.
También anticipó que se pronunciará en el próximo Comité Federal del 5 de julio, aunque reconoció que el margen de maniobra dentro del partido está muy limitado: “La movilización interna está prohibida”.