El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha comparecido en la sede nacional del partido para pedir «perdón» a la ciudadanía tras el informe de la UCO, a la vez que ha dicho que estaba «convencido» hasta hoy de la «integridad» del hasta ahora secretario de organización de los socialistas Santos Cerdán.
Lejos de pedir perdón, no ha asumido ninguna responsabilidad política salvo la de exigirle a Santos Cerdan su dimisión como secretario de Organización y si acta de diputado.
En un tono serio, en el que ha permitido preguntas de los periodistas después de 42 sin comparecer ante los medios, ha reconocido que se equivocó al confiar en Cerdán y que hasta esta misma mañana no ha sabido del papel de su secretario de Organización en la trama de comisiones de obras públicas tras el informe de la Unidad Operativa de la Guardia Civil (UCO).
A preguntas de los periodistas, Sánchez ha manifestado que no tiene intención de adelantar las elecciones y que a diferencia de otros partidos como el PP, desde el PSOE «si asumen las responsabilidades» y toman decisiones como la salida del número tres del presidente del Gobierno.
«Aunque la decepción es grande, la respuesta será siempre contundente» ha declarado el jefe del ejecutivo. «No va a haber convocatoria electoral hasta 2027», ha respondido a preguntas de los medios allí presentes.
En cualquier caso, Sánchez ha aprovechado su exposición para denunciar lo que el considera como «un asedio» de la oposición en cuestiones «que nada tienen que ver con la realidad». «El PSOE actúa cuando hay indicios que pueden ser sustantivos y materiales de causas judiciales como la que nos ha convocado a esta comparecencia de prensa», ha añadido el jefe del Ejecutivo.
En cuanto a la posibilidad de una crisis de gobierno, como habían apuntado algunas voces tales como el exministro Alberto Garzón, Sánchez ha descartado este extremo recalcando que «esto no afecta» al Ejecutivo, sino al ‘número tres’ de los socialistas.