La parroquia San Sebastián Mártir, en San Sebastián de los Reyes (Madrid), acogerá este jueves 29 de agosto, a las 20:30 horas, una macroboda, es decir, una boda simultánea en la que darán el ‘sí quiero’ un total de 18 parejas.
La idea se le ocurrió al párroco, Javier Sánchez-Cervera, tras observar cómo en España «tanta gente renuncia a casarse», entre otros motivos, por los costes asociados a la celebración.
«La idea era sencillamente facilitar que los novios puedan contraer matrimonio. Es que hay gente que se quiere casar, pero no puede. La logística, el dinero, los invitados, los papeles.
Y para un español que tiene su familia en casa, y con medios, pues más o menos cuesta, pero si encima eres extranjero, no tienes dinero, no tienes familia, o se te ha pasado la edad o mil cosas más, pues hay mucha gente que no podía», ha explicado el párroco, Javier Sánchez-Cervera, en una entrevista concedida a Europa Press.
Este sacerdote había visto que una iniciativa similar ya se había celebrado en otros países, por ejemplo, en México, así que escribió al sacerdote que la había impulsado para pedirle consejo. Posteriormente, difundió la propuesta con ayuda del ayuntamiento y también durante las misas.
En cuanto al perfil de las parejas que se casarán este jueves, el párroco explica que es «variado», algunas tienen 60 años, otras son de mediana edad y ya habían descartado casarse por falta de recursos, bastantes de los contrayentes son extranjeros, en su mayoría latinos, y casi todas las parejas tienen hijos.
Precisamente, el sacerdote indica que había constatado que muchas parejas que se acercaban a bautizar a sus hijos o a que hicieran la comunión no estaban casadas. «De eso nos damos cuenta todos», apunta Sánchez-Cervera, al tiempo que recuerda que apenas un 21% de los matrimonios en España son por la Iglesia y que «cada vez hay menos parejas que están casadas».
«Habían tirado la toalla»
En cuanto a los motivos, el sacerdote reconoce que hay «algunos que no quieren» casarse pero añade que también «hay muchos a los que les hubiera gustado» pero que, debido a las circunstancias, «han tirado la toalla»; y achaca esta situación, en parte, al «negocio» que se ha creado en torno a las bodas.
«Los cubiertos cada vez cuestan más, las flores, los vestidos, la moda, todo. La presión es mayor. Entonces ante esa situación, tanta gente renuncia a casarse y la Iglesia se ha quedado un poquito con los brazos cruzados. Vamos a hacer otra cosa, vamos a cambiar algo», ha propuesto.
Tampoco ayuda, a su juicio, el hecho de que el mundo del entretenimiento presente el matrimonio «casi como un objeto de burla». «El matrimonio casi siempre que sale en series o en películas es casi como para reírse. No se tiene en cuenta la dimensión sagrada», ha lamentado.
Por otro lado, advierte de que «las leyes han ido disolviendo» el matrimonio porque lo han convertido en «una institución donde cabe todo, que cada vez tiene menos importancia».
Sin ningún coste para los novios
En este caso, tal y como explica el párroco, se facilita la celebración del matrimonio porque «la Iglesia sale como a organizar la boda» con la ayuda de los voluntarios y a través de contactos.
De esta forma, a los novios no les supone ningún coste pues son los propios vecinos del pueblo y los equipos de la parroquia los se encargarán de todo, desde la coral hasta las fotografías, pasando por las flores, el maquillaje, la peluquería, el brindis, la tarta e incluso unos fuegos artificiales que habrá a la salida.
Tras el éxito de la iniciativa, el sacerdote asegura que repetirán, aunque lo que le gustaría sería «que se pudiera normalizar» este tipo de ceremonias. «Que la Iglesia empezara a proponer macrobodas como una forma habitual en la que se invita a las personas a contraer matrimonio e ir abriendo espacios en los que cualquier persona pueda casarse», subraya.
Por el momento, están elaborando un informe sobre los resultados de la iniciativa para que se pueda analizar y se tomen medidas concretas en las parroquias. «Ojalá que se pueda hacer. Yo creo que mucha gente que no está casada, daría el paso», enfatiza.