Un agente de Policía Nacional de 47 años moría la pasada semana en el distrito al disparársele accidentalmente su arma reglamentaria mientras la limpiaba. El suceso tuvo lugar en las oficinas de la calle Ramírez de Arellano, donde se encuentra ubicada la Brigada de Delitos Monetarios, a la que estaba adscrito el fallecido. Cuando llegó el SAMUR nada pudo hacer por salvar la vida del agente, que presentaba un impacto de bala en el esternón.