El pasado 13 de noviembre una mujer de 40 años falleció a causa de un incendio declarado en su vivienda. La víctima, minusválida, se encontraba sola en el domicilio, ubicado en el primer piso del número 1 de la calle Zubía. Inmueble que al parecer compartía con su pareja.
Hasta el lugar del suceso se desplazaron dos dotaciones de Bomberos del Ayuntamiento de Madrid que consiguieron acceder a la vivienda a través de la terraza y la puerta principal, pero el fuego estaba ya muy extendido. Las llamas habían roto por la fachada del inmueble haciendo estallar los cristales y afectando a la vivienda ubicada justo encima.
Una vez dentro de la casa, los bomberos encontraron el cuerpo de la víctima, que yacía en el salón de la vivienda completamente calcinado. En otra de las habitaciones hallaron el cadáver de un perro, también muerto a consecuencia del incendio.
Alertados por el humo que provocó la deflagración, varias unidades del Samur-Protección Civil desplazadas hasta la zona instalaron un hospital de campaña con el objetivo de atender a los vecinos del inmueble que tuvieron que ser desalojados. Pese a todo, no se registraron más heridos y tan sólo dos personas de edad avanzada tuvieron que ser atendidas por crisis de ansiedad.
El Samur Social trasladó también una unidad en previsión de la necesidad de realojar a los habitantes de las viviendas. Una medida que finalmente no fue necesaria, ya que una vez extinguidas las llamas, todos pudieron regresar a sus casas. Aunque hasta el momento se desconocen las causas que provocaron el incendio, vecinos de la víctima aseguran que la mujer bebía mucho y había amenazado en numerosas ocasiones con quitarse la vida. Al parecer, su matrimonio no estaba pasando por un buen momento y las discusiones con su pareja eran constantes.
