Por Enrique Redondo
Una de las revelaciones de la temporada teatral ha sido sin duda la personalísima obra “Lope en femenino”, donde se reinterpreta a uno de nuestros autores más señeros como es Lope de Vega. Y dentro de esta magnífica propuesta ha destacado la joven Marina Cantos, actriz dotada de un talento y una expresividad muy especial, y a la que hemos querido conocer más de cerca.
Pese a que tu irrupción más sonada ha sido en estos últimos meses en “Lope en femenino”, no eres una recién llegada a este mundillo…
No, desde pequeña yo he estado en contacto con el arte todas sus facetas, ya sea pintando, actuando, bailando… pero fue con 21 años cuando decidí dar el salto a formarme a nivel profesional como actriz para dedicare de una manera profesional.
¿Dónde has estudiado?
Comencé en la escuela El Timbal, de Barcelona y aunque he estudiado con muchos maestros y métodos, destaco a Fernando Piernas, con el que continuo entrenando.
Ahora mismo estás de gira con “Lope en femenino”, que está funcionando realmente bien, tanto a nivel de público como de crítica. ¿Te ha sorprendido su buena acogida?
A ver, cuando trabajas y versionas teatro clásico siempre es una incógnita saber el recibimiento que vas a tener. Pero la obra creo que es francamente interesante, se sale de lo más habitual. Antonio Travieso creo una pieza que está viva, que vamos modificando y donde nunca repetimos exactamente la misma representación.
Yo creo que el espectador está sabiendo apreciar la sinceridad y el trabajo que hay detrás de este texto, y que las actrices estamos dando todo en cada representación. Ha sido muy grato ver la respuesta del público.
¿En qué consiste “Lope en femenino?
“Lope en femenino” es una recopilación de escenas sacadas de obras de Lope de Vega, donde las mujeres toman el protagonismo, es una mirada diferente y muy personal a un autor como Lope de Vega, que sin duda es uno de los dramaturgos más importantes no solo del barroco del español, sino de toda la historia del teatro europeo.
Nuestra pieza, habla de la mujer y su lucha o adhesión en diferentes momentos de la vida. Somos tres actrices interpretando todos los personajes. Le damos la vuelta, ya que en aquel entonces la mujer no tenía cabida en el mundo del teatro.
Pese a tu éxito en las tablas, también tienes interés por el audiovisual…
Sí, claro. Así en estos momentos estoy trabajando en un proyecto muy personal que se llama “Mute”, una serie de seis cortometrajes rodados en un único plano, en blanco y negro. Tienen una narrativa muy sencilla, sin texto ni diálogo, y un contexto muy experimental, donde a partir de una emoción se desarrolla toda la escena.
¿Crees que para ser una buena actriz es imprescindible haber pasado por el mundo teatral?
No, no es imprescindible, hay grandes intérpretes que no han hecho teatro, pero sí que es cierto que el teatro te da un cuajo y una riqueza interpretativa que sin duda ayuda mucho para poder desarrollar y potenciar sus emociones al actuar.
¿Has pensado en dar el salto al audiovisual?
Sí, tengo muchas ganas de hacer algo en audiovisual. Creo que más que sea teatro, cine o televisión lo importante es el proyecto, que sea interesante y tenga un mensaje. Aunque el teatro es un mundo que me apasiona, tengo muchas ganas de cine o televisión.
¿Con quién te gustaría trabajar?
En España tenemos muy buenos cineastas, no sabría decantarme solo por uno en concreto. Me encanta el trabajo de Coixet o Sorogoyen…. por supuesto también Amenabar o Almodovar. Aun así, me encantaría conocer directores nuevos, con nuevas propuestas. Me gustaría trabajar en proyectos atrevidos e interesantes, con un propósito y un mensaje potente, sea o no comercial.
