El suceso se producía pasada la medianoche del 3 de julio, en el número 217 de la calle Cristo de la Victoria. Un piso de la segunda planta de un bloque de viviendas empezó a arder -parece que por culpa de una vela-, y el fuego dejó en total 8 heridos por intoxicación de humo. La familia de tres miembros que allí vivía pudo salir por su propio pie, aunque requirió atención médica y psicológica del Samur. Tras la extinción del incendio, todos los afectados recibieron el alta.