El soterramiento de la M-30 en el tramo del río Manzanares va a generar un incremento de la contaminación del entorno. Así lo advirtió la portavoz del Grupo Municipal Socialista del Ayuntamiento, Trinidad Jiménez, el pasado 20 de junio durante su visita a las obras de la zona.
La razón principal es la instalación de 32 grandes chimeneas sin filtro en los siete kilómetros de túneles que discurren por la Avenida de Portugal y por el río. Algunas de estas salidas se sitúan a menos de veinte metros de las viviendas, en concreto de los edificios del Paseo de la Ermita del Santo.
El concejal socialista de Urbanismo, Félix Arias, confirmó que estas chimeneas son “auténticos edificios subterráneos” por sus grandes dimensiones: 8 metros de ancho por 40 de largo y una altura de 6,5 metros, de los que uno y medio sobresalen en la superficie. Además, las salidas de humo son rejillas de 64 m2 y de uno o dos metros de altura; con lo que el caudal de aire será de 90 metros cúbicos por segundo, carril y kilómetro.
Trinidad Jiménez también manifestó su preocupación porque hasta el momento se desconoce el sistema de filtración de los gases contaminantes a pesar de que se ha pedido información al Ayunta-miento. Jiménez calificó las respuestas recibidas al respecto como “vagas y confusas”.
