Por Mariano Fuentes Sedano
Las elecciones autonómicas del 4 de mayo cierran con una participación récord que avala un nuevo Gobierno liderado por Isabel Díaz Ayuso. Deseando la mejor de las suertes a la presidenta, es importante señalar que el nuevo Gobierno tendrá que manejar una serie de ejes estratégicos de acción que dan forma a la actuación política para los próximos dos años.
Podrían haber sido las líneas maestras de un hipotético pacto que diera continuidad al anterior gobierno, pero ni llegaron nunca a ponerse encima de la mesa ni, lamentablemente, es posible ya tal pacto. Sin embargo, pensando en el bienestar del conjunto de los madrileños, considero que es importante señalar algunas de las prioridades más importantes en la Comunidad de Madrid.
En primer lugar, lo económico. Ya estaba pactado, en esos presupuestos que nunca llegaron a aprobarse, un rescate de 1.000 millones de euros para las empresas afectadas por la pandemia en forma de ayudas directas a familias, autónomos y pymes; con el objetivo de consolidar a Madrid como la locomotora de España.
Del mismo modo, es clave asegurar que no subirán los impuestos y que cada euro que suba Sánchez en los impuestos a nivel nacional se baje a los madrileños en el tramo autonómico. Además, la vacunación tiene que avanzar todavía más rápido para recuperar la normalidad cuanto antes. Hablamos de hacerlo 24 horas 7 días a la semana.
Mientras, como se ha venido haciendo hasta ahora, la Comunidad de Madrid debe asegurar que las restricciones no asfixien a la economía de la región, huyendo de exageraciones y de medidas que no han demostrado eficacia.
Madrid debe seguir siendo un referente en España y Europa para que las familias puedan desarrollar sus proyectos vitales en libertad, asegurando la conciliación, la gratuidad de la educación de 0 a 3 años, garantizando la accesibilidad de las fórmulas de reproducción asistida y respetando las libertades individuales por encima de todo.
Madrid ha sido siempre referente en defensa de las libertades y de la igualdad de todos, y por eso es una de las capitales más abiertas, tolerantes y atractivas del mundo. Es imposible desligar el bienestar de las familias de la libertad educativa.
Tenemos que ser un muro de contención contra la Ley Celaá, garantizar la defensa de la concertada y la calidad de la educación pública para que los padres puedan ejercer su derecho constitucional a elegir la mejor educación que consideren para sus hijos.
Además, hay que apostar por la innovación, introduciendo la tecnología en las aulas y aumentando la excelencia de las universidades madrileñas, muy por debajo todavía de lo que deberían ser. La regeneración y la lucha contra la corrupción sigue siendo un pilar fundamental para evitar el descrédito y la desafección de los ciudadanos por la política.
Por eso se hace necesario proteger a los denunciantes y sacar las garras políticas de la justicia. Madrid necesita, además, mejorar el transporte: ampliar el metro a zonas mal conectadas como Valdebebas o El Cañaveral, nuevos intercambiadores o abrir el metro 24h durante los fines de semana.
Y no sólo eso, la apuesta por el transporte público también mejorará el medio ambiente. Para esto, además, es clave apostar por la reforestación de la Comunidad, en línea con lo que ya estamos haciendo en el Ayuntamiento con el Bosque Metropolitano que rodeará la ciudad con 75 kilómetros de superficie forestal.
Madrid, aunque va mejorando, sigue teniendo un problema con la vivienda. Por eso necesitamos la colaboración de la Comunidad de Madrid para poner en marcha una nueva Ley del Suelo que dé seguridad jurídica en la región.
Hay otras medidas, además, como la deducción en el tramo autonómico en el IRPF por vivienda habitual que incrementarían la calidad de vida de las familias y nuevas propuestas de fiscalidad para el alquiler.
Por último, la cultura y el patrimonio debe seguir siendo un referente de gestión para atraer turismo y garantizar las opciones de ocio en Madrid. La gestión cultural durante la pandemia ha sido ejemplar, alabada en diferentes medios internacionales. En cuanto podamos recuperar el turismo, Madrid volverá a ser esa región vibrante que atrae visitantes de todos los sitios del mundo.
Estas son sólo algunas de las ideas que pueden guiar una acción de Gobierno. Es mejor cuando las políticas son liberales y se desarrollan desde el centro y el consenso, pero los madrileños han decidido con su voto quién debe ejecutarlas. Desde el Ayuntamiento, como siempre, estaremos abiertos a colaborar, con lealtad institucional, en favor del progreso y la prosperidad de todos.
Mariano Fuentes Sedano es Delegado del Área de Gobierno de Desarrollo Urbano del Ayuntamiento de Madrid y concejal de Ciudadanos.
