Según ha anunciado el Ayuntamiento de Madrid, las 42 plazas de la Fundación Padre Garralda-Horizontes Abiertos, destinadas a drogodependientes que carecen de soporte familiar, seguirán prestando este servicio hasta el 31 de diciembre de 2008. Con un presupuesto de 2,3 millones de euros el objetivo fundamental de este recurso municipal consiste en dotar a los drogodependientes de un dispositivo de carácter residencial que funcione las 24 horas del día. La atención está dividida según la sustancia a la que sea adicta la persona que ingresa. Concretando, para el Programa de Opiáceos hay ocho plazas, otras ocho serán para el Programa Específico para Consumidores de Cánnabis y/o Cocaína, cuatro para el Programa Específico para Consumidores de Alcohol y 22 serán de carácter polivalente. Según ha informado el Consistorio entre enero y septiembre de 2006 el índice de ocupación media de estas plazas fue del 88,8% y el índice de retención terapéutica llegó al 60%. Este servicio se lleva realizando de forma ininterrumpida desde 1990 y ha ayudado a cientos de drogodependientes que carecen de soporte social y familiar.
