Una dotación de ‘alazanes’, agentes del Cuerpo Nacional de Policía que prestan su servicio en motos, detuvieron a dos ciudadanos marroquíes -Mohammed B., de 26 años, y Jaouad el B., de 20-, acusados de un delito de tráfico de drogas al ser sorprendidos cuando transportaban seis kilos de hachís empaquetados en nueve bultos, según informó la Jefatura Superior de Policía el pasado 19 de septiembre. Los acusados ofrecieron violenta resistencia y amenazaron de muerte a los policías.
Persecución
Los agentes de Policía, que realizaban tareas de prevención de seguridad ciudadana en el distrito de Usera, patrullaban en sus motos por la carretera de Carabanchel a Villaverde a la altura del poblado de ‘Los toreros’ cuando observaron un vehículo que realizaba un giro sospechoso para evitar acercarse a los agentes. Al darse cuenta de su intento de huida, los policías se dirigieron hacia el coche activando las señales acústicas y luminosas para indicarles que pararan. Los ocupantes del vehículo, al percatarse de la presencia policial, maniobraron bruscamente y trataron de embestir a los agentes.
A continuación se produjo una persecución durante la cual los sospechosos trataron de despistar a sus perseguidores hasta que finalmente fueron obligados a parar. Entonces los alazanes identificaron a los individuos y realizaron una inspección del vehículo, donde encontraron una bolsa en el hueco del asiento delantero derecho que contenía unos paquetes envueltos en plástico transparente con una sustancia ma-rrón que parecía hachís.
“Te voy a matar”
Los sospechosos y el vehículo que conducían fueron trasladados a la Comisaría de Usera-Villaverde, donde volvieron a mostrar resistencia. Concretamente, Mohammed B. amenazó “con una actitud fría y serena” al agente que le esposaba y le dijo: “Acuérdate de mi cara, que cuando salga de la cárcel voy a buscar dónde vives. Te voy a matar”. Los detenidos pasaron a disposición judicial y el vehículo al Área de Inspección Técnico-Policial.
