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Una década de colaboración y educación para el desarrollo

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La convicción de contribuir a hacer de este mundo un lugar más justo, solidario y en paz es la causa que ha llevado a los 143 socios de Karit Solidarios para la Paz a formar parte de esta pequeña gran familia que en 2006 cumplió su décimo aniversario. A pesar de los años trascurridos desde su nacimiento, esta Organización no Gubernamental para el Desarrollo vinculada a la Familia Carmelita no ha perdido la ilusión de los primeros días. Una ilusión que plasma cada día en sus proyectos del Tercer Mundo en países con grandes necesidades de Asia, América y África, así como en la ayuda de los colectivos más desfavorecidos de nuestra sociedad.

Ya ha puesto en marcha 9 delegaciones en toda España (Madrid, Alicante, Barcelona, Onda, Villarreal, Valladolid, Albacete, Murcia y Zaragoza) donde trabajan los voluntarios para potenciar acciones que promuevan la solidaridad. Un objetivo claro mueve cada proyecto o programa: crear conciencia sobre las realidades de marginación y desigualdad, así como trabajar para paliarlas en lo posible.

El trabajo de Karit puede englobarse en torno a tres pilares fundamentales: cooperación, educación y divulgación. Además de los voluntarios, piezas clave en el organigrama de Karit, no puede dejarse de lado la financiación. Proviene en más del 50% de manos privadas y el resto de subvenciones públicas. A partir de estas aportaciones pueden llevarse a cabo programas de cooperación al desarrollo, como la construcción de infraestructuras en países del Tercer Mundo, la organización de talleres de formación y un largo etcétera de trabajos para mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos. Por otro lado, la educación al desarrollo tiene como finalidad promover valores y actitudes relacionados con la justicia y la solidaridad, desde una perspectiva crítica y nada conformista. Karit promueve programas y actividades educativas, elabora material didáctico y organiza campañas de sensibilización y difusión. Como ejemplo, una de sus actividades estrella: el proyecto Giraluna, que nace con la intención de “abrir ventanas” a otras culturas alejadas por miles de kilómetros gracias a Internet. De esta forma los niños peruanos pueden conocer, verse y hablar con niños de diferentes colegios de Elda (Alicante) a la par que trabajan y comentan unos materiales didácticos que hablan de ambos países.

C/ Ayala 33 – 91576 49 46
www.karitsolidarios.org
[email protected]

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