La Colección Gladys Palmera ha aterrizado en la Casa América de Madrid para celebrar con 500 piezas -como carteles, discos de vinilo, fotografías o vestuarios- el legado de las artistas latinas, afro y caribeñas en la música y el espectáculo, como Celia Cruz, Chavela Vargas y Josephine Baker, entre otras, con el lema ‘Latina: Mujer, música y glamour en la Colección Gladys Palmera’.
Esta es la primera gran exposición de Radio Gladys Balaguer, fundada por Alejandra Piera Leta hace 25 años y la mayor organizada hasta la fecha por la Colección Gladys Palmera, una plataforma cultural creada por Alejandra Fierro Eleta y reconocida por su labor en la conservación del patrimonio musical latino y afrocaribeño.
La muestra, gratuita, se podrá visitar del 4 de abril al 5 de julio y se complementa con un programa de actividades que incluirá ciclos de música y cine, visitas guiadas y talleres sobre la representación de la mujer latina en el espectáculo.
«Desde Celia Cruz hasta Chavela Vargas, no solo cantaron, sino que trascendieron, convirtiéndose en referentes en un mundo que, muchas veces, intentó limitarlas a estereotipos», ha subrayado la directora de la Fundación Gladys Palmera, Marta Canorea, durante la rueda de prensa celebrada este jueves, 3 de abril, en la Casa América, en el distrito de Salamanca.
Desde la legendaria falda de plátanos de Josephine Baker hasta un vestido de Celia Cruz, la exposición rinde tributo a figuras icónicas como Lupe Vélez, Dolores del Río, Rita Montaner, María Félix, Ninón Sevilla, Yma Sumac, Iris Chacón, La Lupe, Mercedes Sosa y Chavela Vargas, entre otras.
Desde Lupe Vélez hasta Rita Montaner: Cinco capítulos de la mujer latina
La muestra, comisariada por Andrea Pacheco González y Tommy Meini, responsable de la Colección Gladys Palmera, está estructurada en cinco capítulos que recorren distintas etapas de la historia de la mujer latina en la industria del entretenimiento.
El primer capítulo explora los inicios de la mujer latina en el espectáculo. Desde las primeras estrellas como Lupe Vélez y Dolores del Río hasta la influencia de Rita Montaner en la música, esta sección aborda los primeros pasos de la mujer latina en el cine y los escenarios. También examina los procesos de exotización y apropiación cultural que marcaron su imagen en esta etapa.
El segundo capítulo está dedicado a la edad dorada del cine y la música latina, una época en la que el cine latino y Hollywood vivieron una gran expansión.
Figuras como María Félix, Ninón Sevilla e Yma Sumac consolidaron la imagen de la mujer latina en la gran pantalla. Esta sección profundiza en el glamour, la fama y la construcción del estereotipo de la «latina sensual y exótica».
El tercer capítulo se centra en el empoderamiento y la emancipación de las artistas. Aquí se destacan mujeres que rompieron barreras en la industria, como Mercedes Sosa, Violeta Parra y Chavela Vargas. Se examina cómo algunas artistas lograron independencia creativa y tomaron el control de sus carreras, desafiando las normas impuestas por la industria.
El cuarto capítulo analiza la hipersexualización y exotización de la mujer latina. Desde la icónica falda de plátanos de Josephine Baker hasta la figura televisiva de Iris Chacón, esta sección reflexiona sobre cómo la imagen de la mujer latina ha sido moldeada por la mirada externa. También invita a cuestionar la persistencia de estos estereotipos y su impacto en la actualidad.
Por último, el quinto capítulo, titulado ‘Legado y continuidad en la cultura musical latina’, conecta el pasado con el presente, mostrando cómo el trabajo de estas artistas sigue influyendo en la música y el entretenimiento actuales. Además, destaca la importancia de preservar este patrimonio cultural a través de archivos como la Colección Gladys Palmera.
Pacheco ha subrayado que, durante la investigación, descubrieron que esta historia de la representación de las mujeres en la música y el espectáculo ha sido narrada en su mayoría por hombres. «De las 500 piezas de la exposición, la gran mayoría fueron creadas por hombres: fotografías, portadas de discos, diseño gráfico e incluso la dirección de películas», ha asegurado.
Por su parte, Meini ha comentado que «la exposición comienza con una especie de cabaret, con portadas de discos de la época del mambo y el chachachá, ritmos cubanos que sufrieron una transformación al mezclarse con la música americana y referencias europeas».
«Hollywood también tuvo un rol importante en la construcción de la imagen de la mujer latina, apropiándose de su estética y transformándola en una fantasía exótica», ha detallado.