Un nuevo escándalo sacude a la red familiar del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, que se encuentra en el ojo del huracán tras la presentación de una querella que involucra a su cuñado. Este nueva querella se suma a las controversias previas que han salpicado a su esposa y su hermano, generando un clima de desconfianza y sospechas en torno a la gestión del actual gobierno y que fue analizada anoche en el programa El Mundo Al Rojo.
Desde que Pedro Sánchez asumió la presidencia, su administración ha estado marcada por diversas acusaciones de corrupción y nepotismo. La reciente querella contra Miguel Ángel Gómez, quien se habría beneficiado de contratos y favores públicos en la productora donde trabaj, ha reavivado el debate sobre la ética en la política española. La pregunta que muchos se hacen es: ¿hasta dónde llega la telaraña de poder que rodea al presidente?
La situación se complica aún más al considerar que su cuñado no es el único miembro de la familia Sánchez que ha estado bajo el escrutinio público. La esposa de Pedro, Begoña Gómez, y su hermano, David Sánchez, están acusados de varios delitos como tráfico de influencias o malversación. Este entramado familiar ha llevado a muchos a cuestionar la transparencia y la integridad del gobierno socialista.
Detalles de la querella contra el cuñado
La querella presentada contra el cuñado de Pedro Sánchez, se traería de un delito de tráfico de influencias por haber sido contratado por una productora audiovisual que, tras su fichaje, el Ministerio de Hacienda otorgó 16,3 millones de euros en deducciones fiscales.
La querella sostiene que Vancouver Media, la empresa donde trabaja el cuñado del presidente, «comenzó a beneficiarse de contratos y deducciones fiscales sin concurrencia competitiva». Más adelante explica que «estos privilegios son procedentes de organismos públicos controlados directa o indirectamente por el Gobierno».
Las reacciones a esta noticia no se han hecho esperar. Desde la oposición, partidos como el Partido Popular (PP) y Vox han exigido la dimisión de Pedro Sánchez, argumentando que su gobierno ha perdido toda credibilidad.
Begoña Gómez, el hermano y el cuñado de Sánchez
Primero fue su esposa, Begoña Gómez, quien está siendo investigada por un presunto tráfico de influencias relacionado con adjudicaciones públicas. A este caso se sumó la apertura de diligencias sobre su hermano, David Sánchez Pérez-Castejón, por posibles irregularidades fiscales mientras ejercía cargos en la Diputación de Badajoz.
La situación se ha complicado aún más con la noticia de que el cuñado de Pedro Sánchez, es decir, la pareja de una de sus hermanas, ha sido igualmente señalado en una causa que ya está en manos de la justicia. Este nuevo frente judicial añade tensión a un escenario político en el que la oposición reclama explicaciones urgentes al presidente.
La imagen de un presidente acorralado por los escándalos afectan directamente a sus familiares más cercanos debería hacer que el presidente del Gobierno dimitiese y convocase elecciones. Mientras tanto, se espera que las investigaciones judiciales avancen y que el Tribunal Supremo y otras instancias jurídicas esclarezcan si hay base legal para presentar cargos o si se trata, como sostiene el Ejecutivo, de una persecución política disfrazada de procesos judiciales.