Como viene siendo habitual a lo largo de esta legislatura, la teniente de alcalde y concejala de Empleo y Servicios a la Ciudadanía, Ana Botella, visitó el Centro de Servicios Sociales Guindalera para, como ella misma destacó, “dialogar con su Junta Directiva y comprobar sobre el terreno la labor diaria de sus trabajadores”.
Sin embargo, antes de esta reunión informal, recorrió acompañada del concejal del distrito, Íñigo Henríquez de Luna, el centro de mayores ubicado en la planta baja del número 28 de Pilar de Zaragoza. Allí, sus usuarios plantearon a la concejala algunas necesidades, aunque por regla general se mostraron encantados con el servicio prestado en el centro. Como muestra, las palabras de una de las usuarias habituales, quien calificó este equipamiento como “su casa grande”. Una filosofía que Ana Botella recogió y que trasladará al resto de dotaciones municipales: “Queremos que las dependencias municipales sean la casa grande de los mayores de Madrid”. Además, la concejala del distrito aprovechó para anunciar la próxima inauguración del Centro Integrado Francisco Altimiras. Contará con un centro de día de 65 plazas y una residencia para mayores con 90 plazas. “Será uno de los equipamientos emblemáticos de la ciudad porque desde el mismo pueden verse Las Ventas”, recordó Botella.
