Este domingo, Donald Trump cumple 100 días en su segundo mandato como presidente de Estados Unidos. Un periodo corto pero intenso, donde ha dejado claro que su visión de gobierno es más proteccionista que en su primera presidencia. En solo tres meses, Trump ha reconfigurado la política interna y ha cambiado las relaciones internacionales, generando un cambio en todo el mundo desde su llegada.
Un comienzo fulgurante
Desde su llegada nuevamente a la Casa Blanca, Donald Trump ha batido récords firmando más de 130 órdenes ejecutivas en menos de tres meses. Su estrategia ha sido gobernar por decreto, «saltándose la burocracia de Washington», como él mismo declaró en su discurso en Pensilvania.
Entre las medidas más destacadas está el endurecimiento de las leyes migratorias, la eliminación de programas ambientales establecidos por anteriores administraciones y el refuerzo de la vigilancia en la frontera sur.
Mientras sus seguidores celebran su determinación para cumplir promesas, sus detractores advierten que «Trump está minando los equilibrios democráticos tradicionales».
100 días de Trump:Un nuevo orden internacional
En el terreno internacional, Trump ha impulsado un replanteamiento radical de las alianzas tradicionales de Estados Unidos. Ha cuestionado públicamente la eficacia de la OTAN, ha promovido negociaciones bilaterales más ventajosas para Estados Unidos, y ha retirado al país de varios acuerdos multilaterales, incluyendo tratados medioambientales y pactos de cooperación económica.
«América ya no va a pagar por proteger a otros», repitió durante su visita oficial a Polonia. Esta nueva doctrina, conocida como «América First 2.0», ha provocado tensiones diplomáticas con aliados históricos como la Unión Europea, Canadá y Japón.
Durante estos primeros 100 días de su segundo mandato, Donald Trump ha intensificado sus esfuerzos diplomáticos para poner fin a la guerra en Ucrania, buscando posicionarse como el principal mediador en el conflicto.
El 26 de abril de 2025, en un encuentro privado con el presidente ucraniano Volodímir Zelenski en la Basílica de San Pedro del Vaticano, ambos líderes discutieron la posibilidad de un alto el fuego y una solución negociada al y sugirió la imposición de sanciones más severas si no se lograban avances hacia la paz.
Economía: auge proteccionista
Uno de los principales ejes de estos 100 días ha sido la política económica. Donald Trump ha implementado una agresiva política arancelaria, imponiendo nuevos gravámenes a más de 70 países, especialmente a China con quien mantiene aranceles del 145%. Según su administración, esta medida busca «proteger a los trabajadores estadounidenses y relocalizar la producción».
Sin embargo, el impacto ha sido inmediato: los mercados financieros han reaccionado con fuertes caídas, el índice S&P 500 ha registrado pérdidas históricas, y varias empresas estadounidenses han advertido de aumentos de precios que afectarán a los consumidores. Por lo que en los últimos días, su política arancelaria parece haberse moderado con la búsqueda de acuerdos con diferentes países.
Economistas de renombre, como Paul Krugman, han advertido que «los aranceles de Trump pueden precipitar a Estados Unidos en una recesión innecesaria». Además, se ha producido una guerra comercial a gran escala, con aranceles recíprocos con numerosos países que ha generado tensiones diplomáticas.
Política migratoria de Trump: deportaciones masivas y cierre de fronteras
En el ámbito migratorio, Trump ha cumplido con su promesa de tolerancia cero con la inmigración ilegal. Se han intensificado las deportaciones, las redadas en centros de trabajo y barrios enteros, y se ha restringido severamente la concesión de asilo político. Además, se ha comenzado la ampliación del muro fronterizo con México, proyecto que fue uno de sus principales emblemas durante la campaña.
«Protegeremos nuestras fronteras como nunca antes», proclamó el presidente en un acto en Texas. La ONU y diversas organizaciones humanitarias han denunciado violaciones a los derechos humanos en el trato a inmigrantes y solicitantes de refugio.
Eficiencia en la administración
En el plano interno, la estrategia de Donald Trump los 100 primeros días apunta claramente a consolidar el poder presidencial. Ha destituido a altos funcionarios del Departamento de Justicia que consideraba desleales, ha reducido las competencias de organismos independientes como USAID, que gastaba millones de dólares en políticas woke.
Para ello está contando con Elon Musk, como asesor y liderando el departamento DOGE, con el objetivo de hacer más eficiente la administración y eliminar gastos innecesarios.
Política de Donald Trump: entre el fervor y el rechazo
Trump mantiene una base electoral leal que representa alrededor del 48% del electorado, según las últimas encuestas. Sin embargo, su índice de desaprobación general supera el 45%, reflejando una nación dividida.
Manifestaciones masivas se han registrado en ciudades como Nueva York, Chicago y San Francisco, exigiendo respeto a los derechos civiles y al medioambiente.
«Estos 100 días son solo el principio», prometió Trump en su discurso conmemorativo, augurando que lo que viene será aún más disruptivo.
100 días que redefinen a Estados Unidos
Los primeros 100 días del segundo mandato de Donald Trump han sido una mezcla de acción frenética, rupturas políticas y cambios estructurales que ya están dejando una profunda huella.
Su apuesta proteccionista, su concentración de poder y su nueva política internacional están redibujando el papel de Estados Unidos en el mundo y cambiando las bases del orden mundial.
El reto ahora será ver si el país como seran los próximos años en materia presidencial o si, como vaticinan algunos expertos, » Donald Trump ha iniciado un ciclo de transformación irreversible en la política de Estados Unidos».